Un tocado para cada ocasión.

   Pues sí, hay un tocado para cada ocasión. Depende de como vayas vestida obviamente pero también depende de la ceremonia a la que vayas a ir. No nos referimos a la cuestión de protocolo, podrías llevar el mismo tocado a una boda que a un bautizo por poner un ejemplo, pero hay diferencias... digamos que es cuestión de "sensibilidad", la forma del tocado, la forma de peinarte, maquillarte...

Tocado, manicura y uñas en el mismo tono, melena ladeada y redecilla cubriendo el rostro.

        Estas son algunas ejemplos de tocados, que aunque puedan parecer aptos por igual para cualquier evento hay pequeñas diferencias. 

Kate Middelton, con tocado en forma de casquete. El encaje y la redecilla siempre hacen buena pareja. Este tipo de tocado encaja a la perfección para bodas y actos oficiales como es su caso.

Los tocados poco voluminosos y colocados sobre un recogido simple pero favorecedor,  son la elección perfecta para bautizos, Mary Donaldson es toda una maestra en el tema.

Amanda Hearst, una invitada de la famosa "boda de los horrores". Los tocados en forma de platos, al contrario de lo que pueda parecer son de los más fáciles de llevar, suelen incorporar una diadema que facilita la tarea. Son la forma ideal para bodas de mañana, no llegan a ser pamela pero cubren lo suficiente como diferenciarlos de un tocado de tarde. Aunque son planos de volumen siempre es conveniente incorporar algún elemento que potencia la verticalidad, como las plumas, te harán más alta.